Una empleado cómplice, una cerradura poco resistente... Los robos en comercios suelen producirse por descuidos mínimos que terminan saliendo bastante caros.
Los dueños de locales siempre optan por sistemas de seguridad sumamente costosos como un único método para proteger estos espacios. Pero, ¿es suficiente?
Mantener la seguridad del local debe tomar el mismo trabajo y tiempo que te puede llevar llenar un inventario, no debés concentrarte solo en estos sistemas, existen otros métodos que te permiten reforzar aún más la seguridad y de manera mucho más sencilla
No se trata de procesos muy largos o difíciles de aplicar ¡Todo lo contrario! Tomá nota y tené en cuenta cada paso para la seguridad de tu comercio.
Conocé bien a tus empleados
Antes de contratar personal para la empresa es necesario que conozcas la mayor información posible de la persona, los antecedentes, sus referencias, dónde trabajó anteriormente y por qué ya no sigue en su último lugar de trabajo.
Es importante contar con personal capacitado y confiable, en muchos casos los robos en comercios se realizan con ayuda de algún empleado. Incluso en algunos casos solo busca trabajo en el lugar con el fin de perpetrar el robo, por eso es importante que estés seguro que la persona que contratas es la correcta.
Dinero en efectivo
El dinero de la caja registradora es lo primero que buscan los ladrones al entrar a un local. Sé precavido y tené sólo pequeñas cantidades, también procurá guardar ese dinero en otro lugar cuando cerrés tu negocio.
Recuerda que la mayoría de las ventas se realiza a través de tarjetas de débito o crédito, así que la falta de efectivo no va a perjudicar las ganancias.
Cámaras
Para preservar la seguridad de tu negocio no hay nada mejor que una buena cámara, buscá una que grabe las 24 horas del día y que tenga una excelente definición para ver todo lo que ocurre cuando no estás.
Con estos equipos podés ver cada movimiento que hay en el establecimiento.
Puertas y ventanas seguras
No te preocupes sólo por la imagen del local, algo muy importante es contar con cerraduras de alta calidad para las puertas y ventanas e incluso candados. Verificá bien que queden seguras cuando cerrás el negocio, no querrás ser víctima de un robo solo por un descuido.
Otro cosa que podés implementar es un detector de metales para ubicarlo en la entrada del negocio, esto servirá para percatarse a tiempo si entra alguna persona armada.
Capacitá a tus empleados
Los empleados y vos deben estar preparados para cualquier incidente. Buscá ayuda y capacitá al personal sobre qué pasos seguir en caso de que se produzca un intento de robo.
La seguridad de las personas que estén en la tienda siempre será lo primero, es importante saber cómo actuar en estos casos.
Teléfonos a mano
Tené en un lugar visible los números de la policía de la zona y los de emergencia para alertar ante cualquier intento de robo o actitud sospechosa.
No sigas rutinas
Cuando llevas las riendas de un local es usual que tengas horas establecidas para cada tarea, es justo en esos momentos donde más alerta tenés que estar.
Evitá que tus empleados mantengan una rutina en los horarios de contar el dinero de la caja y pagá los salarios en horarios distintos y en lugares seguros, preferentemente con cheques o transferencias bancarias.
Comunicación con el personal
La comunicación entre todos los empleados de local no solo es necesaria para su buen funcionamiento, también para saber manejar temas de seguridad.
Es recomendable que exista un sistema interno de comunicación, que los trabajadores tengan una vía para hablar entre ellos ante cualquier situación de peligro.
Si este sistema falla, podés poner en práctica una serie de palabras o términos que alerten al personal si hay un intento de robo o alguien sospechoso en el lugar.
También realiza reuniones mensuales con los trabajadores para verificar que estas metodos estén funcionando y así puedan perfeccionarlos.
Puntos ciegos
En los comercios siempre existen puntos difíciles de visualizar, por eso es importante que ubiques muy bien estantes y otros elementos que podrían impedir que te percates de un robo.
Otro método es disponer de un espacio para que los clientes que lleguen con bolsos muy grandes los guarden mientras permanecen en el negocio.
Productos costosos
Si ofrecés en la tienda productos muy costosos o pequeños ubicalos en espacios cerrados y de difícil acceso para los clientes.
Los objetos de mayor valor deben estar en el interior de vitrinas con cerradura o al menos cerca de la caja, siempre a la vista y donde haya alguien presente.
Muchos robos ocurren sin que te des cuenta, así que es importante que creés una política en torno al tipo de bolsos con el que las personas pueden ingresar al establecimiento.
¿Ya ves? Hay mucho que podés hacer para proteger tu negocio y sin tener que gastar tanto dinero.
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