Tips para elegir la mejor ubicación de tu comercio

Indumentaria no es lo mismo que gastronomía. Microcentro no es lo mismo que provincia de Buenos Aires.

Estás por abrir un comercio, pero no sabés dónde ubicarlo… ¡No te preocupes!

Se trata de una decisión muy importante que puede significar el éxito o el fracaso de tu negocio. La combinación de una buena ubicación, un producto o servicio de calidad y el precio correcto, hará que tu local sea todo un éxito.

Tenés que tener en cuenta que abrir tu negocio en un establecimiento que está a mano sólo porque te pertenece o es de un amigo o familiar, puede significar un gran error.

Al elegir la localización, debés hacerlo pensando en el mejor lugar de acuerdo con el rubro de tus productos.

Es indispensable que tengas en cuenta el nivel socioeconómico de la zona, el perfil de la gente que la habita y la competencia. No tiene sentido que abras una peluquería en una zona que está repleta y donde la clientela es fiel.

Por lo tanto, elegir la ubicación óptima va a depender de varios factores que son los que definen tu negocio.

¿Qué debo considerar al elegir mi ubicación?

Pocos se toman el tiempo de otorgarle a la ubicación la importancia que merece. Sea por falta de tiempo o de recursos, no profundizan lo suficiente, lo que los puede perjudicar a largo plazo.

A veces, por miedo a que las zonas más transitadas sean demasiado caras, optan por situarse en zonas que los obligan a cerrar luego de seis meses. Por lo tanto, es importante que elijas la ubicación que te permita maximizar tus beneficios.

¿Ya tenés un lugar en mente? Acordate de reflexionar acerca de las siguientes cuestiones:

Atractivo y facilidad de acceso para clientes

¿Se trata de una zona con mucho flujo de gente? ¿Hay estacionamiento? ¿Es una zona comercial?

Hay varios aspectos que debés considerar. Por ejemplo, si tu negocio se beneficiaría estando en una zona movida, pero con buenos accesos de transporte público; o todo lo contrario, si es mejor que esté un poco más alejado, pero que cuente con una buena infraestructura y aparcamiento para clientes.

También tenés que analizar la evolución esperada de la zona. No es lo mismo si aún está en desarrollo, pero tiene proyección a ser un gran zona comercial, o si se trata de un espacio muy residencial que nunca va a cambiar.

Analizá la competencia

¿Querés destacarte? Analizá tu entorno.

Este paso es muy importante. Si bien, generalmente es preferible que la competencia no esté cerca, algunas veces la suma de competidores del mismo rubro, forma un polo de atracción para los clientes.  Lo importante es que tengas distintivos.

Analizá a tu consumidor

¿Cómo piensa tu principal cliente? ¿Qué le gusta? Identificalo y conocelo lo mejor posible para poder analizar sus comportamientos, tendencias y presentarle el producto adecuado.

Factores legales 

Existen restricciones legales e institucionales que asignan ciertas zonas para rubros comerciales. Por ejemplo, existen áreas de la ciudad en las que está prohibido abrir comercios.

Si bien, es un aspecto más burocrático, no deja de ser esencial. Por lo tanto, ¡informate lo mejor que puedas!

Proximidad a los proveedores

Aunque vivimos en una era en la que el transporte no es un problema, si puede ahorrarte muchos costos estar cerca de tus principales proveedores. Supongamos el caso de que quieras abrir una verdulería: tus productos llegarán más frescos y en mejor estado y condiciones.

Características del espacio

Es importante que tu negocio cumpla con las normativas legales y las medidas de seguridad necesarias. Además, tenés que pensar si deberás refaccionarlo o si el lugar es apto para ampliaciones a futuro.

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